Carlos Magdalena

Este asturiano lleva años trabajando como conservador en los Royal Botanic Gardens de Kew, en Londres y colocando su nombre en los libros de botánica gracias a su habilidad para recuperar especies tropicales casi extinguidas y descubrir otras nuevas. Su más sonado éxito fue la salvación, para todos, del nenufar enano ugandés (Nymphaea thermarum), la especie de nenúfar más pequeña del mundo. Otro logro mayúsculo lo consiguió con la Ramosmania Rodriguesii (café marrón) una especie del grupo de las muertas vivientes (especies que no se espera que escapen de la extinción sin intervención humana), según los botánicos. «Sólo existía una planta que llevava 30 años sin producir semillas. Esto me desilusionó, pero conseguimos sacar semillas y ya hemos devuelto más de 700 ejemplares de esta especie a su país de origen».